
Dos edificios ocupados, uno en Madrid y el otro en Barcelona, permanecen comoherencia de la gran movilización que el sábado sacó a la calle a decenas de miles de personas convocadas por el Movimiento 15-M. Cerca de la Puerta del Sol, en un antiguo hotel, los idignados debatían ayer qué uso dar el edificio: espacio asambleario, refugio para desahuciados, vivienda de los disidentes cubanos acampados frente al Ministerio de Exteriores o sencillamente como centro social. O todo a la vez. Lo que está claro es que en el interior caben todas las propuestas y los ideales del 15-M.
[…]»No entendemos cómo se permite que haya 3.200 pisos públicos vacíos, y 50.000 familias desahuciadas», denunció Salva Torres, profesor de secundaria y portavoz del colectivo concentrado en el inmueble. Torres también quiso llamar «a todas las acampadas a defender este espacio contra la dictadura de las finanzas» ( JUAN D. QUESADA / NATALIA BRAVO – El País, Madrid / Barcelona – 17/10/2011